25 abr 2009

Esperanza, motivación y paciencia: claves del éxito…

Quiero dedicar este artículo especialmente a vosotros, los estudiantes de español en la Universidad de Nuakchot, Mauritania, alumnos que están viviendo la misma experiencia que he vivido hace tan sólo dos años. Asimismo quiero contarles la nueva experiencia que estoy viviendo aquí en Granada, especialmente lo que está relacionado con el mundo académico. Pero, antes de empezar, quiero pediros disculpas por no haberme extendido en el presente artículo, dado que dispongo de poco tiempo. En cualquier caso, espero escribir más artículos sobre distintos temas en el futuro.
De entrada, he de señalar que, hasta el momento, ha sido un auténtico placer elegir Granada como ciudad, no sólo para estudiar, sino también para vivir nuevas experiencias y compartir momentos tan dulces con gente de todas partes del mundo. En realidad, no me salió del todo bien los primeros meses (algo muy normal). Pues, todo empezó con preocupación e incertidumbre. Cuando llegué el primer día sin conocer a nadie, mi primera preocupación fue encontrar un alojamiento, algo que era difícil en el mes de noviembre, ya que estaba todo casi ocupado, así que pasé dos semanas enteras en una pensión, pagando algunas veces 20 euros y otras 40 e incluso 60 euros al día, por lo que les aconsejo a todos que tengan la beca o lo que sea para empezar una nueva carrera aquí que vengan en el mes de septiembre o como muy tarde en octubre para no sufrir esta situación. Después de encontrar una habitación, empecé a preocuparme por la adaptación, no sólo a las clases, los métodos, sino también integrarme en la vida social de la ciudad. Con muchas dificultades pude superar las asignaturas del primer cuatrimestre, debido también a que falté a algunas clases, ya que llegué en noviembre y las clases habían empezado en octubre, con lo cual me costó mucho, incluso llegué a pensar en que no sería capaz de acabar el Máster en el tiempo estimado, pero, cuanto más se pienso en esto más motivación tengo y paciencia para superar las dificultades, eso sí, siendo muy atento y aprendiendo de mis errores. Porque cada vez que detecto un error propio o que un profesor me lo señala y me lo explica me motivo más, ya que siendo consciente de sus errores, ser capaz de detectarlos y aceptar las críticas de los demás hacia ti, forma parte de tener conciencia de lo que uno está haciendo y, por lo tanto, tener esperanza y motivación de superarlo. De ahí, poco a poco, he ido adaptándome a esta nueva situación con toda la voluntad.
En este sentido, quiero destacar algunas cosas que hemos de tener en cuenta para llegar a una plena integridad en la Universidad Española en general y la Universidad de Granada en particular. Por ejemplo, en nuestra universidad (Universidad de Nuakchot), lamentablemente, no sabemos lo que es leer, investigar, ni mucho menos usar las nuevas tecnologías. Es cierto que venimos aquí para aprender a investigar pero, hace falta tener algunos conocimientos básicos sobre lo que uno va a estudiar o investigar. Me refiero a realizar búsquedas en internet, también en las bibliotecas y hacerle caso a tu profesor, es decir, hacer las lecturas que te recomienda, entre otras cosas. Por otro lado, me costó un poco lo de redactar en español, dado que no es mi lengua materna, pero, aun así, para realizar un curso de Posgrado, hace falta saber redactar a nivel académico. En este caso, quiero deciros que no os preocupéis, porque todo se aprende a lo largo del tiempo pero, con motivación, esperanza, paciencia y, si me permiten, voluntad. Quiero también señalar que el conocimiento de la lengua inglesa, para los que querrán hacer un Máster o lo que sea sobre Traducción e Interpretación, es muy importante para no decir imprescindible, y eso porque la mayoría de las lecturas correspondientes se encuentran en dicho idioma, o sea, la mayoría de las lecturas se publican a nivel internacional. Lo digo porque tuve muchísimos problemas al respecto, ya que el Máster cuenta con una formación intensiva, por lo que no disponemos de mucho tiempo para combinarlo con otras tareas. Dicho de otra manera, no nos da tiempo de aprender un idioma mientras estamos investigando en el mismo. Aquí, quiero hacer hincapié, sobre todo, en que este Máster (Máster en Traducción e Interpretación) no trata de enseñar a los estudiantes a traducir o a interpretar, sino a enseñarles a investigar en Traducción e Interpretación, que es distinto. Lo digo, porque llegué aquí con la idea de que el Máster sirve para formar a traductores y/o intérpretes y, resulta que esto es lo que se tiene que aprender en Licenciatura (Maîtrise en el caso de Mauritania). En fin… Debemos tener claras muchas cuestiones antes de nada, entre ellas, que la Traducción y la Interpretación, a pesar de ser dos conceptos estrechamente relacionados, difieren en muchos casos. (Escribiré un artículo, en otras ocasiones, que trata especialmente este tema).
Así entonces, bajo mi punto de vista, para llevar todo esto a cabo, uno tiene que mantener la esperanza, a pesar de todo, tener paciencia y eso conlleva una gran motivación. Lo digo porque solemos venir aquí con una situación muy difícil, además, en la mayoría de los casos, nos encontramos aquí con estudiantes que han tenido una formación mejor que la nuestra y por tanto, será difícil competir con ellos. No se trata de asustaros, simplemente intento ayudaros a estar bien preparados para no caer en la trampa y recordaros que nada es imposible…
No quiero terminar estas palabras sin felicitaros por el interés que estáis demostrando cada día para venir aquí a estudiar, a vivir nuevas experiencias y a aprender mochas cosas. Y estoy convencido de que lo vais a lograr y me alegra un montón de que el Club esté avanzando año tras año y espero veros pronto aquí en España.

¡Mucho ánimo y un abrazo muy fuerte para todos!


Kane Amadou Yacoub, desde Granada.

22 abr 2009

África a la ULPGC: una beca para vivir una experiencia


Desde África a la ULPGC: una beca para vivir una experiencia Seis estudiantes africanos han sido seleccionados para acudir a la ULPGC a realizar sus estudios de posgrado gracias a la primera convocatoria del Programa Becas Canarias-África. Para todos ellos es una experiencia única que, a pesar de separarles de sus familias durante un año, les ayudará a ampliar sus conocimientos para aportarlos en sus países.

Nagi, Dina y Jose Joao son tres estudiantes de la ULPGC. Pero no son tres estudiantes cualesquiera. Los tres tienen en común que proceden de África y han tenido la suerte de ser seleccionados entre varias decenas de alumnos más de sus países para cursar sus estudios de posgrado en la ULPGC, gracias a la primera convocatoria del Programa de Becas Canarias-África que ha puesto la Dirección General de Relaciones con África del Gobierno de Canarias con las dos universidades canarias. Este programa está gestionado por el Vicerrectorado de Relaciones Internacionales e Institucionales de la ULPGC a través del Centro Universitario de Cooperación Internacional para el Desarrollo (CUCID).

Son conscientes de que son unos privilegiados, y por este motivo viven intensamente esta experiencia desde su llegada, el pasado mes de noviembre.. Mientras Jose Joao Miranda y Nagi Mouhamedou estudian la modalidad de Diploma de Estudios Avanzados en Economía (Aplicaciones a las Finanzas y Seguros, en Economía Sectorial, medio Ambiente e Infraestructuras), en los edificios de Empresariales de la ULPGC; Dina Zerbani acude diariamente al edificio de Ingeniería a estudiar la misma modalidad en Ingeniería Ambiental y Desalinización.

Los tres echan de menos a sus familias, y saben que serán un año de mucho trabajo, pero saben que esta oportunidad sólo se presenta una vez en la vida.

Jose Joao tiene 38 años y actualmente trabaja en Cabo Verde, en el Ministerio de Centralización, Habitación y Ordenación del Territorio. Navegando en Internet conoció el Programa de Becas Canarias-África y no se lo pensó dos veces. “Este año me va a ayudar mucho en mi trabajo, porque mi especialidad la baso en el Medio Ambiente y en el Desarrollo Sostenible”, dice, “y estas áreas son las que trabajamos desde el Ministerio conjuntamente con los ayuntamientos”.

Para Joao esta experiencia no es la primera, ya que anteriormente ha cursado estudios de posgrado en China, pero en esta ocasión se muestra muy agradecido a la comunidad universitaria de la ULPGC, y sobre todo al profesorado, “que está muy preparado, principalmente en el área financiera”.

Nagi Mouhamedou también cursa el mismo posgrado que Jose Joao. Sin embargo, su experiencia es algo distinta. Tan sólo tiene 26 años, y en su país, Mauritania, dirigía la única revista de habla hispana, del Club Andalus, en la Universidad de Novakchott. “Es la primera vez que salgo de mi país, aunque ya sabía el idioma porque tengo las licenciaturas de Interpretación y de Ciencias Económicas”. Aún no estaba trabajando, y en el Programa de Becas Canarias-África vio una excelente oportunidad para ampliar sus conocimientos y vivir una nueva experiencia. “Cuando llegue a mi país, con esta formación más especializada, quiero empezar a trabajar”, señala.

Actualmente ve muchas diferencias entre la ULPGC y su Universidad en Mauritania: “aquí tengo más servicios, más instrumentación para trabajar y a eso se une que los profesores son muy amables”.

Dina Zerbany es la única chica. Llegó de Marruecos y tan solo tiene 24 años.. Estudiaba en la Universidad de Tetuán y quiso, como hace dos años hizo su hermana, salir de su país a seguir ampliando sus estudios. Gracias a la beca ha podido llegar a la ULPGC para cursar el Diploma de Estudios Avanzados de Ingeniería Ambiental y Desalinización, que mejorará sus estudios de Biología Aplicada y Medio Ambiente. “Me siento feliz por vivir esta experiencia”, comenta. “estuve estudiando tres meses, de manera intensa, el español, antes de venir y ahora, después de conocer a profesores y alumnos, estoy encantada de estar trabajando con ellos”.

Los tres coinciden en resaltar que esta vivencia no sólo les aporta una mayor formación, sino una nueva visión del mundo. “Estamos conociendo una cultura muy diferente a la nuestra, y esto hace que esta experiencia sea especial”.

19 abr 2009

Boda española y boda mauritana, pequeña comparación

Ante todo quiero saludar desde Granada a todas aquellas personas que estudian lengua y cultura hispánicas, tanto en la universidad de NKT, como en el centro FESAD. Siento no haberos escrito antes, pero os prometo volver a escribiros una y otra vez, sobre distintos temas, cuando tenga tiempo. Un afectuoso saludo desde Granada.

La boda mauritana
Comienza automáticamente tras la firma del acta matrimonial, y la lectura del Basmala (primera sura del Corán) normalmente por un imán, el padre de la novia, o incluso cualquier otra persona puede encargarse de ello, con música y bailes. Una vez terminado esto, el novio manda a la familia de su novia, la dote, ésta depende de la situación económica y social de ambos.
Tradicionalmente todas las bodas se celebran por la noche. La novia se viste una melhfa, preferiblemente de color negro, aunque da igual, se pinta las manos con Henna y se cubre con elementos de joyería moderna y tradicional. El novio, por su parte, se viste con una draá de color blanco o azul y un pantalón tradicional, con cinturón largo de cuero. Este cinturón, a diferencia del normal que llega hasta las rodillas, llega hasta los pies. Por último, el novio lleva, atado al cuello, un turbante de color negro.
Para la fiesta se levanta una tienda o jaima especial, generalmente cerca de la casa de la familia de la novia, o sus abuelos. Comienza la música y el baile, que se prolonga hasta altas horas de la noche, hasta la llegada de la novia, que entra en la jaima, donde la espera el novio, acompañada de sus amigas y en medio de aplausos y uyuyues.
Mientras tanto, para animar más aún la fiesta, en la puerta de la jaima se organiza un fuerte “combate” entre el bando del esposo y el de la esposa por hacerse con esta última.
El primer día de boda termina cuando los músicos dejan de tocar, a la hora que tengan convenida las familias. En ese momento, la mayor parte de los presentes se retiran quedando sólo los parientes y amigos más cercanos y las amistades de los esposos.
Después de una semana los esposos juntos invitan a todos sus amigos y amigas, y les preparan una bonísima comida como punto de partida para su nueva vida como familia dependiente.
El marido es quien se va a encargar de los asuntos económicos de la casa, mientras la mujer se ocupa de hacer las tareas de su nueva casa.
Finalmente, queda por decir que en Mauritania, las personas pueden casarse a cualquier edad, y la ley no prohibe el casamiento de las menores por ejemplo, como es el caso de España.

La boda española

La mayoría de las bodas se celebran a través de una ceremonia religiosa, en la iglesia por la religión católica. Aunque en los últimos años hay muchas parejas que se casan por el juzgado, es una ceremonia civil. La novia va vestida con un vestido blanco largo y el novio con traje de chaqueta.

Una vez que la ceremonia religiosa termina, los novios se van con sus invitados (familiares y amigos de los novios) a celebrarlo en un restaurante. Allí ofrecen a los invitados un menú, que suele constar de unos aperitivos, un primer plato, un segundo y postre. Después los invitados bailan y beben refrescos y alcohol durante unas horas. Normalmente, si la boda comienza a las 8 de la tarde, suele terminar a las 2 ó 3 de la madrugada. Los invitados regalan a los novios o bien dinero o bien algún objeto para la casa donde van a vivir. A veces, aprovechan ese dinero para pagar el propio banquete o comida de bodas.

Después, los novios se suelen ir de "luna de miel", un viaje que puede durar una o dos semanas. En cuanto a los gastos de la celebración se comparten entre los dos novios, o los padres también ayudan.

La vivienda donde van a vivir también se paga entre los dos. Una semana antes de la boda, los novios hacen por separado la despedida de soltero. Consiste en que cada uno se va con sus respectivos amigos a cenar y a una discoteca.
En España la gente no puede casarse con menos de 18 años, aunque el pueblo gitano no la respeta mucho, por ejemplo.
Mohamed Ould Ahmed
Universidad de Granada
mawaz85@hotmail.com