19 may 2009

Carta a abierta del profesor Francisco Vidal a los estudiantes de español

Estimados estudiantes y miembros del Club al-Andalus:

Durante mi pasada estancia en Nuakchot el encargado de Asuntos Culturales de la Embajada de España, D. Rafael Ávalos, me entregó un ejemplar de la revista “Lupa Estudiantil”, número 8 (marzo de 2009. No pude leerla entonces por las muchas actividades y personas interesantes que conocí durante esos días, pero ahora en España la he leído y me ha sorprendido positivamente, me ha parecido estupenda y me ha gustado.
Quiero felicitaros a todos por el esfuerzo y por el resultado. Todos sus artículos son muy interesantes, creativos y profundos. Yo he disfrutado leyéndolos todos. Es admirable lo que habéis conseguido a pesar de las dificultades y falta de medios que sé que existen en vuestro país. Por esto, vuestro trabajo tiene más mérito aún.
Desde mi trabajo como profesor en la Universidad de un país rico y desarrollado con alumnos que tienen muchos medios, os envío mi felicitación y mi reconocimiento y os animo a que sigáis adelante con el estudio del español y con la revista.

Un saludo afectuoso,

Francisco Vidal.

18 may 2009

Adiós a Mario Benedetti

Me permito utilizar este blog colectivo y que normalmente es la voz de los estudiantes, para hacer mi pequeño a homenaje a Mario Benedetti, que acaba de dejarnos. Os dejo un poema que he descubierto hoy por casualidad buscando material para las clases para recordar a Mario Benedetti...

No te salves

No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora ni nunca
no te salves
no te llenes de calma
no reserves del mundo
sólo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo
pero si pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.